Tal parece que tendrán que esperar aquellos que ansiaban que el príncipe Harry y Meghan Markle retomaran una relación cercana con la familia real británica, tras la muerte de Isabel II. El rey Carlos III les envió una invitación para que se unieran a las festividades de Navidad, pero, de acuerdo con una experta en la materia, ni siquiera contestaron la misiva.
La información la dio a conocer The Sun, el medio inglés que citó a Angela Levin, una conocida periodista y escritora, experta en realeza, que en 2018 publicó Harry: A Biography of a Prince, un texto acerca de la vida del menor de los hijos de Diana Spencer.
De acuerdo con Levin, el propio rey invitó a los duques de Sussex a su residencia en Sandringham, en Norfolk. Se trata de la primera festividad oficial que se celebrará sin Isabel II. “La muerte de la reina significa que no habrá tanta presión para tener a toda la familia junta, lo cual es bueno porque parece que Harry y Meghan no estarán presentes”, expresó la biógrafa al medio inglés.
Más adelante, manifestó que los príncipes de Gales, William y Kate, estarían presentes y acompañarían a Carlos y Camilla durante parte de las vacaciones.
Según la escritora, la ausencia de Harry y Meghan, en lugar de ser perturbador, podría ser un verdadero alivio para todos. “La familia querrá que sea un día muy positivo después de la muerte de la reina y creo que la presencia de los Sussex ciertamente lo empañaría”, señaló.
Uno de los principales motivos por los cuales el matrimonio no iría a Sandringham es la expectativa por el documental que los duques están por estrenar en Netflix, y por el que cobraron más de 150 millones de dólares con la compañía de streaming. Tal parece que los Sussex temen por la reacción que la familia real podría tener luego de ver el material.
El programa se lanzará justo antes de Navidad y existen rumores de que en el mismo Harry y Meghan discuten acerca de los actuales reyes y también sobre William.
Sin embargo, también trascendió que Harry intentó postergar el estreno para después de las fiestas de diciembre, pero no logró llegar a un acuerdo con Netflix y se mantuvo la fecha de lanzamiento. “Imagino que podrían volver a atacar a la monarquía y ser muy desagradables con el rey, a pesar de que perdió a su madre”, expresó la periodista.
En ese sentido, también señaló que era un misterio la razón que los duques le darían a sus hijos, sobre todo al mayor, Archie, para justificar por qué no pasarían las fiestas con la familia de su padre.
Pero también existe otra posibilidad. Puede que sea la propia familia real británica la que no quiera compartir con los duques tras el estreno del tan ansiado documental, y añadió que la pareja “quiere títulos para Archie y Lilibet, pero no quiere que se mezclen con las mismas personas que pueden dárselos”.